. . . y los habrá peores.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Pequeño viajero

Sé de un niño pequeño
que porta gafas de aviador
y sueña con sobrevolar
mares inmensos de espuma.

Sobre una máquina alada
de caparazón metálico
despoja al viento a su paso
dando sentido al camino.

Quiere ver selvas, monumentos,
lugares escondidos y recónditos,
recorrer largas sendas, muy lento,
empapar de imágenes sus recuerdos
cuando no estén, retomar esos momentos. 

Sé de un niño pequeño
que se echó la maleta al dorso
y sueña con lazos eternos
de tablones de madera y amasijo férrico,
corriendo contra el paisaje
a lomos de un gusano gigante
serpentea como su ancestro de carbón
adentrándose en montañas y disfrutando entre valles.

Goza de las sonrisas de hospitalarios desconocidos
se deleita durante horas de oportunas conversaciones
en el refugio de la sombra de un bar oscuro
en tolerancia explorando otras culturas
cataratas por la garganta de frío ámbar,
porque no hay forma de amar más pura.

Sé de un niño pequeño
que ama el calor del hogar
pero no teme, sino sueña,
con vivir para viajar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario